En esta castañada nos pusimos de acuerdo un montón de amigos para ir a la montaña. La verdad es que no cogimos ni una castaña, pero nos lo pasamos muy bien.
Y cuando me puse a hacer el LO de recuerdo del día me surgió un problema. Tenía cuatro fotos que quería que aparecieran, pero no acababa de ver bien ninguna de las composiciones. Y le daba vueltas (ésta aquí, ésta en este sitio... y luego de otra manera, y luego al revés...) y no acababa de ver bien nada de nada. ¡Lo veía todo demasiado lleno!
Hasta que después de mirar la hoja vacía un buen rato pensé: pero qué borrica soy, ¡haz una composición doble! Y sólo fue empezar y tener claro cómo lo quería todo.